Monday, March 30, 2009

Pensamientos Random del Día de Hoy

-Una breve pieza de arte cotidiano se puede apreciar todos los días en las estaciones de metro del DF. ¿Soy la única que ama los dibujitos?... En verdad están chidos. Creo que es de lo mejor que ha salido del DF. Amo el chapulín y el cañoncito. Otra tiene un león. Y hay una palmerita también. ¡El barquito!...





-Hoy me tocó hacerla de pastora de patos. Hasta una chavita que iba pasando se rió. Iba yo haciendo mi jogging de costumbre por la orilla del lago, y un par de patos fugitivos habían abandonado la ribera y se aventuraban cerca de la calle. Demasiado cerca. Madre mía, a éstos los planchan, pensé. Y fui a espantarlos (con manoteos y todo) de vuelta hacia al lago. Misión cumplida y dos patos menos apachurrados en las calles ginebrinas.


-Qué vergüenza lo de Manu Chao en México. Que si sí lo corrieron, que si no... Bueno, no sé, pero yo amo a Manu Chao desde tiempos inmemoriales. Desde "Bongo Bong", que creo oí por primera vez en el año 2000 (¿2.o de secundaria?). Y el buen Manu, con el tiempo no hace más que ponerse más inventivo, más pueblo y más mundo. Rainin´ in Paradize es enorme. Y escuchen ahora: "Me llaman calle". Pinche rola hermosa.









-Viva Manu Chao. ¿Alguien sabe si es cierto lo de que tiene SIDA?... Por ahí lo escuché hace tiempo.

-Britney Spears estuvo drogada y pelona y fue una idiota, pero nunca estuvo gorda. De verdad. Me refiero a su primera y desastrosa "reaparición" en los escenarios, cuando el mundo la basureó hasta la insanidad porque "se veía gorda". De verdad, mijos, si yo tuviera un cuerpo así inmediatamente después de parir dos bebés, daría brincos de gusto. Esto vino a mi mente porque una prima me mandó un video desgarrador acerca de la anorexia (defendida por muchas lobotomizadas como "un estilo de vida" aceptable) y de las percepciones irreales y ridículas que se tienen del cuerpo femenino ideal. Britney Spears es una yonqui desmadrada a quien no me gustaría nadita tener como vecina... pero no, gorda nunca estuvo. Al menos no en esa reaparición en particular.

-Quiero que cuando regrese a mi casa, mi hermano haya comprado el Mario Kart Wii. Está inmensamente sheeengooohhhn. También quiero conocer a su nuevo gatito.

-Cuatro palabras: Benedicto y los condones. Ya, en serio, ¿en qué siglo vive Benedicto?
Dí por qué, dime Benedicto, dí por qué, eres viejito, dí por qué, noooo te guuuusta veeeer la realidaaaaaad.... ¿Por qué, Benedicto? ¿Tus declaraciones te las crees en serio, o todo es parte del circo fascista de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana? ¿Tienes una agenda oculta para que toda África muera de SIDA? ¿O sí te crees en serio muy en el fondo que los condones "empeoran" el problema? ¿Planeas salvar Zimbabwe a punta de rezos? ¿Por qué, Benedicto, por qué tienes menos carisma que el hígado encebollado?...

-Cómo me siguen gustando los dos tipos de GIMUN. Ay, madre. Hacía muuuucho tiempo que un tío no me gustaba de esa manera. Bwah bwah bwah. =(

Hacía años, en verdad años, que no me daba lo que viene siendo la infatuación adolescente. Shame on me. Pero estoy feliz de comprobar que sigo teniendo alma de mocosa. =)

Tengo todavía muy presente, demasiado presente, cómo de chavita yo solía enamorarme en forma catastrófica de tipos que no me iban a pelar jamás. Pero es que yo en serio me ponía mal. Sufría, sufría y era muy feliz de no ser feliz. Ese sí, para que vean, que era todo un "estilo de vida" aceptable, uno muy mío. Me acuerdo que una vez, para demostrarle a mi mejor amiga que estaba yo en el hoyo, le pedí que me tomara el pulso después de ver, en el estacionamiento del Tec, tan sólo el carro de mi azote emocional de turno. No hablábamos del tipo, no, hablábamos tan sólo de ver su coche (ya que ello significaba, desde luego, la posibilidad muy real de encontrármelo ahí). Y yo les juro, mi amiga se los puede comprobar ahora (ella sabía desde entonces tomar el pulso con exactitud: es doctora); que sí se me aceleraba el corazón en mal plan. Ahora ya no soy tan somática, pero ha sido divertido comprobar que todavía me da lo que viene siendo el crush. Ya ven mijos, el amorss no se ha ido. ¡Salud!





-Ya quiero ver "El Naranjo". Ya quiero ver "El Naranjo". ¡¡Ya quiero ver "El Naranjo"!!... Mi amigo el cineasta ha logrado ser como Disney en la infancia: todos esperamos con ansia su nueva producción anual. Amé "Isla" y sé que amaré "El Naranjo". Me urge verla; pero por hallarme del otro lado del charco, voy a ser la última en verla.





Saturday, March 21, 2009

Un día más de GIMUN...

... un día más de GIMUN y yo me colapsaba, sin duda. Fue enormemente fatigante, enormemente chido, enormemente memorable y bonito, demandante e increíble.


Hace varios meses, desde antes incluso de venir a Ginebra, mi otro compañero de San Luis que también vino a las mismas prácticas que yo, entusiasmado me habló de una cosa llamada "Gimun" y me animó a anotar y no olvidar la siguiente dirección: http://www.gimun.org/, para que la Caudilla reviviera su pasado de Tecmunera itinerante (y es que, sin grandes penas ni glorias, echando cuentas resulta que he estado en el TECMUN ya cuatro veces: una como delegada de Colombia, una en el Comité Organizador, una como Secretaria/Multichambitas en el Consejo de Seguridad y una más como Secretaria/Moderadora/Multichambitas en la OMC... y he amado cada minuto de ello); y se embarcara nuevamente en un Modelo de las Naciones Unidas, actividad generalmente juvenil que demanda un enorme esfuerzo y entraña una inmensa satisfacción. He ido a cada uno de esos Tecmunes sin esperar nada a cambio, porque muy pocas veces se obtiene algo a cambio, más alla de un posible e hipotético cartón que diga "Mejor Delegado". Y si puedo seguiré yendo.


Pero claro, la cosa desde el principio olía a Ligas Mayores: ¿un Modelo de las Naciones Unidas en Ginebra, capital mundial de la diplomacia y sede de la ONU real?... Madre mía.



Con el paso de los días pensaba si tomarme la cosa en serio o no, bueh, un MUN como muchos otros, por qué no intentarlo, por qué sí; intenso trabajo, ñoña preparación, arduas investigaciones, escribir la postura del país, recordar con desagrado que, en el fondo, siempre he sido una persona nerviosa y muy mala para hablar en público, y encima en inglés...


Mandé mi solicitud dos días antes de la fecha límite, casi deseando que no me admitieran, o que el archivo se les perdiera o algo. Hice mi ensayo de motivación, y me quedó bastante bien, pero no gracias a ningún esfuerzo en particular: escribir es una de las pocas cosas que se me dan con absoluta naturalidad (y hay quien lo ha llamado "talento"). Mandé mi CV y todo lo demás; datos, experiencia previa, todavía dudando. Y es que, aunque una parte de mí empezaba a morirse de ganas de estar dentro (¡¡Un modelo de la ONU en la ONU misma, so tonta, vale la pena intentarlo!! ¿No entiendes que ha de estar chidísimo?); mi huevona interior de todos modos pedía vacaciones permanentes y el ala huelguista de mi cerebro se negaba a una carga intelectual de ése tamaño. Y es que la gente tiene maneras cañonas de auto-sabotearse, de conformarse con algo que no le conviene. La Caudilla no es la excepción. Tengo que admitir que a ratos deseaba no participar, ahorrarme el esfuerzo y seguir siendo la de siempre en ésa semana de marzo.


Lamentablemente para mi departamento cerebral de las vacaciones, a las semanas me llegó el e-mail. La augusta persona de usté acaba de ser aceptada. Turquía. Consejo de Seguridad. Hey, no tienes poder de veto, pero al menos tienes la aceptación y la posición fregona de un país mediador entre el Oriente y el Occidente. Superósom!!




Luego vino el siguiente e-mail, que conllevaba menos fiesta y más billete. Me informan que la participación cuesta 200 de los suizos. ¡¡Doscientos!!... Las neuronas que se negaban a trabajar saltaron de inmediato con sus pancartas negativas: "Nooo mi Lic, pos está retecaro, pos qué se me hace que así pos no se va a poder..."

Pero ha llegado el momento de mi vida en que se me grabó al fin el mensaje de que Nada Se Pierde con Intentarlo, y el viejo adagio mexicano de que No Hay Peor Lucha que La Que No se Hace. Y aquí es donde entra la historia de cuando la Caudilla se volvió una bandida.

No les haré el cuento muy largo: mi compañero potosino (que obviamente también participaba) y yo hicimos el intento de solicitar un par de Ayudas Financieras a las que en realidad no teníamos derecho; solicitud para la cual echamos mano de unas pequeñas, insignificantes, minúsculas, irrelevantes chiquititas mínimas tergiversaciones de la verdad. Y las obtuvimos. Las dos. Nadie nos preguntó nada, simplemente y como por arte de magia nuestra cuenta por pagar se redujo de 400 francos suizos a cero francos suizos. Así. No quieren saber los detalles, ¿verdad que no? ¡Perfecto!


Digamos que en Suiza el dinero simplemente funciona de manera distinta. Aquí la gente no habla de dinero, sencillamente la gente lo tiene. Y mucho. Así que, nuestra participación digamos que no nos salió completamente gratis, sino que... bueno, sí nos salió completamente gratis.



Estábamos dentro, lo que siguió fueron semanas de sentarme a la computadora y no estudiar nunca lo suficiente. Para un modelo de la ONU, insisto, por muy pinchurriento o por muy grandioso, uno nunca puede prepararse lo suficiente. Jamás. Ni los delegados reales de la ONU saben todo lo que deberían. Uno tendría que dedicarse el día entero de meses enteros leyendo las últimas noticias, las viejas noticias, la historia de la ONU, la historia del Comité, la Carta de las Naciones Unidas, la posición exacta de tu país y la de todos los demás países y las relaciones entre ellos, todos ellos; el tópico, la historia del tópico, la posición de tu país con respecto al tópico, la evolución de la política en tu país y finalmente cuáles son los temas con los que te podrán tirar popó y tú a otros.

Afortunadamente, ya sabemos el secretito de que en los MUNes no gana quien estudia más; es completamente una cuestión de actitud, verbo, comportamiento, reacciones y diplomacia. Un mensaje es 20% qué dices, y 80% cómo lo dices.

Y las palabras, correctamente elegidas y en la mezcla y tono correctos, pueden significar una amplia gama de cosas diferentes.

Pero aún así yo me sentía poco preparada al inicio de mi preparación y aún menos preparada el día que comenzó todo el desmadre. No hay que ser tibios: con mi sentido autocrítico de siempre, me sentía una completa ignorante. ¡Valor, chica, valor!...





No quiero aventarme una descripción detallada de día por día. Y es que el GIMUN, Geneva International Model of the United Nations, dura cinco días. Bueno, en realidad dura siete, pero dos de ellos se dedican por completo a comentar el Protocolo, reunirse con el comité, conocerse, sentirse a gusto, pasear y organizar dos o tres fiestas. ¡Mientras que el TECMUN enterito dura dos días!... Nunca más me volverá a parecer largo o cansado. Nunca.


El Palacio de las Naciones, sede de la ONU de a deveras. Lleno por una semana de niños de entre dieciocho y treinta años. Salas preciosas, placards, micrófonos en cada lugar, paredes elegantemente decoradas. Gente de decenas de países, caras blancas y negras y chinas y morenas y latinas y de ojos verdes y de ojos rasgados, y árabes y francesas y judíos y rusas. La regla general, en toda lógica, es que nadie debe representar a su propio país, un requisito nada difícil de cumplir cuando se tienen muchos menos países por representar que países de origen de los representantes. Aparte de los Delegados y las Mesas (Chairpersons suena mucho mejor que "Mesas" a decir verdad, y la palabra no ha dejado de perder estatus desde que salió la estúpida canción de "La Mesa que más Aplauda"); también existían las posiciones de: Periodista, Embajador, y Representante de alguna organización pertinente a cada comité: la FAO, Human Rights Watch, la OMC. Gente nueva y amigos instantáneos. El inmenso edificio de la ONU. ¡¡Fiestas diario, organizadas por GIMUN!!... Ya no aguanto más días de dormir sólo cinco horas. Un día quedándonos hasta las diez de la noche en la biblioteca para escribir resoluciones; al siguiente de fiesta y cantando rancheras frente a todos los participantes, con el resto de los mexicanos. La noche del fondue, la noche internacional, la noche de vayámonos a un bar y perdamos la conciencia.

¡Y los intérpretes simultáneos!... El modelo es tanto en francés como en inglés, y se tienen traductores e intérpretes (que no son lo mismo); los primeros para traducir documentos y/o repetir discursos en un idioma después de que fueron dichos en otro, los segundos son seres geniales que tienen la habilidad inexplicable de escuchar un discurso en un idioma, con audífonos, y al mismo tiempo estarlo traduciendo (interpretando) en otro idioma frente a un micrófono. Y los delegados en cada mesa tienen su auricular y todo el rollo. Éso, por supuesto, le da al GIMUN un aire de completo realismo respecto a la ONU, respetuosa intocabilidad frente a cualquier otro modelo, y como un 40% más de Puntos Fresa.




Yo no puedo imaginarme una tarea más complicada, un talento más grande, que escuchar en un idioma y al mismo tiempo hablar en otro. Me hice amiguita de una de las intérpretes y ella insiste en que no es nada extraordinario, que se aprende y se practica... Que diga lo que quiera, para mí sigue siendo un talento digno de los dioses, y una habilidad que exige un IQ de 250 y un estado de trance iluminado. Nunca me explicaré cómo lo hacen.

Nuestros tópicos: El Conflicto en Sudán, muy convenientemente aderezado por la casualidad de que hace un par de semanas al presidente sudanés le mandaron una orden de arresto de parte de la Corte Penal Internacional; y la Responsabilidad de Proteger.

Resulta digno de mención que Turquía, para el caso de Sudán, está del lado de los malos porque su relación política con Sudán es inmejorable, así que me tocó el conveniente papel de defensora del genocida. Genial. Turquía luchó con las uñas para que ese tópico no se abriera al principio, ello me daría tiempo de preparar algunos argumentos convincentes. No lo logramos y nos lanzamos de cabeza a debatir si el presidente de Sudán debería o no ser arrestado. Yo no salía de mi trinchera de defensora de la soberanía nacional y de la idea de que la cosa se pondrá aún peor si arrestan al presidente (lo cual igual y es cierto). Suerte que no estaba sola, me hacían compañía algunos otros países llenos de libertad política y humanismo como Libia, China y... y creo que nada más.

Por un momento pareció que estábamos ganando la batalla; nuestros argumentos, a fuerza de repetirlos y repetirlos y de mencionar cuán ofendidos nos sentíamos todos los países musulmanes por cualquier cosa que dijeran los países occidentales (cosa que se apega en grado sumo a la realidad), parecían estar colando. Pero entonces llegó Mukesh Kapila.

Resulta que el Consejo de Seguridad tuvo el martes por la mañana una conferencia especial con Mukesh Kapila que es, ni más ni menos, quien fuera representante de la ONU en Sudán en los años 2003 y 2004. Y nos dio una pequeña e ilustrativa plática. Y resulta que éste señor, oigan ésto; es uno de los que dieron a conocer al mundo (CNN y todo), el genocidio que ocurría en ése momento en Sudán. Perdió su trabajo en Sudán, recibe de vez en cuando amenazas de muerte, habló con mujeres violadas, sobrevoló pueblos convertidos en barbacoa (sus propias palabras). Paquete completo. Y Sudán voló a los encabezados del mundo, tres semanas después el Consejo de Seguridad (el de a deveras) se ocupaba del tema.




No me malinterpreten, fue una conferencia maravillosa y no la cambiaría por nada. Fue conmovedora y nos hizo creer que la gente puede lograr cosas aunque tengan todo en contra. Aumentó nuestra fe en la ONU. La cosa se puso mesiánica cuando la delegada de Vietnam sufrió una explosión de fanatismo y de sentimientos encontrados; lloró y le declaró su amor a Kapila y le preguntó que si podía abrazarlo y sin esperar respuesta se lanzó a sus brazos y propuso una sesión de fotos con él. Fue increíble tener ahí a ese señor, el único problema es que el debate tal vez habría tomado otro curso si la conferencia hubiera sido el viernes en la tarde y no el martes a primera hora. Porque obviamente Kapila, sin quererlo y sin saberlo, acababa de hacer cachitos todos y cada uno de nuestros desesperados argumentos pro-Sudán, los usados y los que apenas íbamos a usar. Muchos idiotas incluso tuvimos la ocurrencia idiota de preguntarle su opinión acerca de nuestros posibles argumentos futuros, sólo para verlos morir una muerte maravillosa y mesiánica.

Todos los que hasta entonces habíamos tenido que hacerla de amigos de Sudán; es decir los representantes de países islámicos, la fácilmente ofendida Libia y la luchadora Sudáfrica y la interesada China y el no-intervencionista India y la cordial Turquía, y por supuesto Sudán mismo, ya no sabíamos en dónde meternos y ya ninguno de nosotros se atrevía a repetir que la Corte Penal Internacional debería dejar a Sudán en paz. Lo cual también fue un poco injusto porque, vamos, traer a éste señor que fue prácticamente de los primeros en gritar ¡¡GENOCIDIO EN SUDÁN!! y por lo tanto un héroe indiscutido; es como si a mí que soy atea me trajeran a Jesucristo Superestrella para que me ponga a debatir directamente con él. Lanzarnos con Sansón a las patadas de esa manera no podía sino tener una pesada influencia en el debate; pero yo insisto y lo digo en serio: ninguno de nosotros habríamos cambiado esa conferencia por ninguna otra.

Al final todo se solucionó (o casi, pero supongo que en la ONU así se dice cuando se aprueban resoluciones), increíblemente se aprobó la resolución que propusimos India, Rusia y su servilleta la turca. Luego tuvimos que retomar el tópico porque el Secretario General del modelo, junto con algunos otros actores, decidieron hacer el debate más interesante y se inventaron la crisis de que acababa de estallar la guerra entre Sudán y Uganda, lo que al menos logró que por un momento Sudán dejase de ser el patito feo, para que Uganda recibiera por un rato las patadas y los disparos de popó. Pobrecita ella, nuestra delegada de Uganda, muy arregladita y a todas horas pintándose los labios antes de pedir la palabra. Con el segundo tópico ya no nos dio tiempo de hacer gran cosa, en mi caso al menos mi cerebro ya se había ido de vacaciones a Istanbul después de cinco días de debate intenso, por mi boca ya sólo salían idioteces repetitivas acerca de la necesidad de respetar la soberanía, perdí la pista de cuáles enmiendas y resoluciones estaban siendo votadas y en algún momento terminé pensando: "Soy Turquía. No soy europea ni africana, no soy totalmente asiática ni estoy completamente alineada con los demás países musulmanes... ¡¿quién demonios soy?! ¡¿Ahora con quién me alío si soy un maldito comodín?!"... Creo que tuve un gran despegue y varios momentos de brillante lucidez (así como otros de completa idiocia, como cuando ataqué a Estados Unidos por la invasión a Irak sin recordar que Turquía también invadió Irak), pero al final la neurona ya estaba agotada.



La ceremonia de clausura fue grandiosa y (sorprendentemente) divertida, al final ni mi compañero de San Luis ni yo ganamos nada, pero así es la vida y así es la ONU, supongo.

A veces se gana, a veces se pierde... y a veces estás parado en la azotea del Antiguo Edificio de las Naciones Unidas haciendo gritos de pavorreal para llamar a los pavorreales del jardín (eso es una historia real, protagonizada por mí); o incluso tienes el placer de corretear a uno de los bichos a través de los jardines (eso también pasó de verdad, protagonista: la Delegada de Sudáfrica).

Y nuestros Chairpersons... Ufff, las mesas. Cómo les explico que me enamoré de los tíos de las mesas. Bueno, no. En realidad sólo me enamoré de uno de ellos. Pero es de verdad, no me lo tomen a la ligera. ¡¡La madre que lo parió!!... El tipo era como un dios griego, y miren que ni siquiera es común que me guste el look de "dios griego". Güero, los ojos azules, el mentón grande, las greñas chinas y desarregladitas, todo grandote y fuertote. El tipo está más alto que el Jet d´Eau de Ginebra. A mí siempre me ha gustado que los hombres sean al menos un poco más altos que yo, y miren que con mi metro cincuenta y cuatro de estatura no es un requisito difícil de cumplir, de hecho es completamente factible. Pero cuando un güey es mucho más alto que yo, madre mía, de alguna manera, como alguna vez dijo uno de mis amigos gays, "me impone". De alguna manera puede gustarme así tenga la cara de Elba Esther, tan sólo por ser muuuuuy alto. Algo tienen de encantadores los hombres que me sacan tres cabezas. Así que ahora ya puedo pretextar que si no gané nada en el GIMUN, fue porque me pasé buena parte del modelo observando al de la mesa, escuchando su varonil voz. Uff, papá. Pido un punto de privilegio personal para quedarme viéndote como estúpida, sin Derechos de Réplica en caso de que te imagine en traje de baño. Por otro lado, ningún debate me hizo sentirme tan realizada como el hecho de bailar con él durante unos minutos en la cena de gala, cuando terminó el Modelo. Fui harto feliz de tener, por esos lindos instantes, mi cabeza tan cerca de su esternón. Me cuidé, por supuesto, de no quitarme los zapatos ni agacharme ni tantito, porque el tipo seguro que me iba a perder de vista o al menos confundirme con los diseños del piso. También bailé con uno de los Recruiters. Que también me gustaba. Y también fui muy feliz.

Si algo queda de todo ésto, es la enorme satisfacción de que un día diré a mis nietos "estuve en un modelo de la ONU en la ONU", y ver cómo toda esta ñoñería tiene un efecto indeleble en nuestras vidas: durante mucho tiempo quedamos tan acostumbrados a pensar a la manera ONU, que cuando vas a desayunar en las mañanas pides un Punto de Privilegio Personal, y a continuación te pasas la mañana expresando tu profunda consternación por la falta de mantequilla en la cocina y recordando las pasadas Resoluciones que exhortan a los Miembros a recordar su Responsabilidad de Proveer Mantequilla, solicitando la cooperación financiera para resolver urgentemente el problema de la mantequilla y decides seguir ocupándote de la cuestión.

Friday, March 13, 2009

¿Por qué la gente tiene problemas con mi sexualidad?...

Primero, mi maestra de danza me echa de la clase porque jura que soy lesbiana y quiero con ella.

Luego, en mi visa para hacer las prácticas profesionales, me ponen: "Sexe: M" (M de "masculino", o de "machota", en fracés no hay otra opción. Y mi compañero hombre tiene la misma "M"). O sea que ya no soy lesbiana, sino un masculino en toda su extensión.

Y ahora, mi novio o amiguito especial o lo que sea, aún no está muy claro, quien es un ciudadano de aquí y de allá y de todos lados pero sólo sabe unas tres palabras de español que tal vez escuchó en la tele, tiernamente me pone en un e-mail "Hi papi!", presumiblemente porque nadie se tomó el tiempo de explicarle que "papi" se aplica por lo general a los hombres y "mami" por lo general a las mujeres. Ayyy, cosiii. Así que ahora, además de ser hombre, ¡estoy bien bueno! =D









Soy niña, carajo, ¿¿qué no ven?? ¡Estoy de rosita! ¡Tengo aretitos y todo!... Y es más, ¡al crecer hasta me gustarán los hombres!

Ya díganme, ¿por qué es? ¿Es porque me gusta el Nintendo? ¿Es porque jugaba futbol y practicaba tae Kwon Do? ¿Es porque no me maquillo diario? ¿Es porque no me gusta pintarme las uñas? ¿Es por gritona? ¿Qué sigue, mañana alguien me abordará en la calle para tratar de venderme un súper paquete completo de masculinidad con pipa, sombrero de ala ancha, tacos futboleros, una concha protectora para el Tae Kwon Do, tijeras para mi bigote y un equipo para agrandar el pene?... jajajajajajaja!

Me acordé de mi prima que una vez me hizo reír muchísimo porque estaba checando su mail (su carpeta de Spam, al parecer) y de repente dice, con vocecilla tierna y suave: "Aayyyy, qué molesto, por qué tanta gente quiere agrandar mi pene?"....

Yaaaa, neto. Soy niña. Y hetero por añadidura. Es hora de que la vida pare con las bromitas antes de que cuestione seriamente qué demonios soy.

Wednesday, March 11, 2009

Bueno, ¿y al final qué? ¿Vamos a calificar para el mundial?

¿Alguien sabe cuándo se decide si vamos a calificar o no para el mundial de Sudáfrica 2010?


No sé, pero he oído que ya bien pronto nos vamos a tener que poner a rezarle al Santo Niño de Atocha y bailarle como locos a San Pascual Bailón, porque de otro modo nos la vamos a peluquear, como diría finísimamente uno de mis compañeros de casa.


Seré una malinchista digna de la hoguera y lo que quieran ustedes, pero si al final no calificamos, la verdad es que me voy a reír y voy a sentir que nos lo merecemos.
Hay que verlo: nos merecemos no calificar al mudial por mediocres, porque así está el apoyo nacional al deporte y porque, sin tener los pelos en la mano, aún así podría jurar que el futbol del país también está inflado de corrupción y de nepotismo. Tal vez éso nos haga volver a la realidad de que nos urge hacer algo, nos hemos vuelto malísimos; dándonoslas de muy pistolas cuando ya tenemos problemas para ganar de panzazo contra países como Haití y Costa Rica. Y empatando con !Angola!, en el 2006. ¡¡Angola!! ¿Cuántos de nosotros sabemos dónde queda éso?


Y Estados Unidos, vaya, Estados Unidos hace mucho que nos gana sin remedio, es hora de olvidar ése antiguo orgullo generacional de que nosotros trapeamos el piso con los gringos en el futbol. No, man. Dat´s so over.


Pero ahora La Caudilla debe recordar que el futbol a ella le importa un pepino. Salud.



Ya mejor pongámonos a esquiar o algo.

Wednesday, March 4, 2009

Lo bueno vuelve: "Gears of War me ownea".

Desde la bóveda de los artículos pasados de mi difunto blog anterior (la antigua versión cutre y MSN-era del nuevo y mejorado In Blog We Trust), he rescatado alguna que otra cosilla.

Recordando mi pasado de videojugadora. Ah, sweet memories de cuando tenía tiempo para éstas cosas.

Su artículo anciano de hoy: "Gears of war me ownea". Publicado el 13 de noviembre de 2008.



Gears of War me ownea.

Mi hermano me hizo jugar Gears of War 2. Y sufrí mucho.

Estos jóvenes de ahora y sus juegos con tanta tecnología gacha. Ah, definitivamente no es lo mío. Y miren que tengo un amplio pasado videogamer y de hecho, he caído en la cuenta de que yo llevo más años jugando que él de vida, aunque ahora él ya me lleve de corbata. De pequeña me gustaba ver los juegos de otras personas; empecé a jugar como a los seis. SNES. Era un gran sistema. De niña me importaban tres pepinos las Barbies y las clases de danza, más bien pasé mi infancia (y luego ya no tan infancia) acompañada del SNES, N64, GameCube, GBA, y me quedé en los primeros del Wii. Pero llega un momento en la vida en que se te instala la senectud y la adultez contemporánea, y uno tiene sus primeras responsabilidades de petate y ya no tiene tiempo ni cerebro para estas cosas.

Mis favoritos de la vida: los Marios, los Zeldas (chapeau), los Mario Karts, los Smash Bros, Yoshi´s Island, los Donkey Kong Country (los tres gobernaban mi mundo... neta los amé). Star Fox. Hasta Pokémon. Jaja, geek. Y Tetris, ¿a quién fregados no le divertía Tetris?... Los Final Fantasies no los jugué gran cosa pero me encantaba ver cómo lo hacía mi primo y soy fan a morir de su música (el VII... Dios, ¿por qué no has vuelto a mandar nada como el Final Fantasy VII?... ¿sólo porque miles de geeks allá afuera aún lloran la muerte de Aeris?). Y en la compu también me la viví con Age of Empires y simuladores de construcción de todo, desde hospitales hasta parques de diversiones. ¡Dance Dance Revolution y la maquinita de Pump It Up! ¡¡Tantas oportunidades de hacer el ridículo en tan sólo un minuto y medio!! ¡Más de una vez me eché la pinta de clases para bailar en ella, como los vagos de categoría!!... Ah, tanta diversión. Tantas horas echadas por el retrete. Quién pudiera ahora, quién dispusiera ahora de tantas tardes ociosas.



Así que ya lo ven, yo soy de la época de los monitos lindos y las gráficas cute; ésto de los pistolazos y los chorros de sangre nomás no va con mi manera femenish de ser gamer. Y no, el gore no va conmigo, tampoco en los juegos. ¿Dónde quedaron Banjo-Kazooie y sus encantadorsísimas notitas musicales con ojitos?... ¡Que vuelva la magia de los 16 y 64 bits!
Soy totalmente Vieja Escuela.

Pero como me decía sabiamente mi hermano: "Aayy pues están más sangrientos los Happy Tree Friends (N. del E.: cierto). Sólo imagínate que éstos también son monitos como Mario, nada más que sangrientos y con sierras"... Ewwwk.

Además, lo hace con toda mala intención, porque sabe muy bien que en los juegos de disparos en primera persona siempre he apestado muchísimo. Ahora sí que, no es por demeritar a mi género, pero hay que reconocer que los juegos de primera persona están hechos para los hombres. Por aquéllo de la percepción espacial. Son 100% mente masculina; pues se tratan por completo de que la puntería y que los espacios por acá y por allá y controlar la mirilla telescópica, y ¡PUM DISPARA AHORA!, ya saben. Venga, chicas, tenemos que aceptar que no nacimos con habilidades para todo. Y en ese rollo de los espacios, la verdad es que ellos sí nos ganan, ¿por qué no aceptarlo?... No está padre ir por ahí siendo una feminazi.

Pues no sé a otras gamer ladies, pero a mí, eso de tener que controlar con una palanca una mirilla de rifle que se mueve como loca, y con otra palanca tener que correr, y con aquél botón saltar, y calcular espacios virtuales, y encima acordarme de disparar mi rifle de asalto o la mugre que sea, me convierte en una completa tarada. De ahí que los First Person Shooters y yo tengamos una larga historia de odio mutuo.

(UPDATE: Es más, algunos primos ya hasta me hicieron ver mi error y me informaron suavemente que Gears of War ni siquiera es un FPS, sino un juego de acción puro. Hay dos posibilidades: a lo mejor es porque lo confundí con Halo, que hasta donde yo entiendo es un FPS; o a lo mejor es simplemente porque GoW tiene pistolas y tiros y cosas feas, y para mí ésos son los First Person Shooters. ¿Ya ven? ¿Ven como no sé nada?... Pues para mí, sólo por tener pistolas y sangre es un FPS, y punto).

Ahora, no es que esto me pase con todos los juegos; para los de aventuras y carreras siempre fui muy buena. A más de un amigo hombre que se las daba de pistolísima le puse una soberana arrastrada (y desde pequeña, lo que sea de cada quien. Guardo dulces recuerdos de venganzas virtuales perpetradas sin piedad contra primos o chamacos bastante más grandes que yo). Y es que ahí entra la coordinación de nuestros lindos deditos, y para eso nosotras sí podemos ser más chidas que ellos. Y con práctica, como todo en la vida.



Oh, Yoshi. Cute. Siempre amé esta imagen. La tenía en poster.


Tampoco está de más que recordemos cuando el Game Boy SP fue para niñas:



(Game Boy SP: feel free to stare, ladies).

Siempre amé esta imagen. Ojalá la tuviera en poster.

Publicidad de Nintendo dirigida a mujeres. ¿Son originales o qué?...
Papi, yo así sí juego. =)

Lo bueno vuelve: "Isla rompe madres"

Desde la bóveda de los artículos pasados de mi difunto blog anterior (la antigua versión cutre y MSN-era del nuevo y mejorado In Blog We Trust), he rescatado alguna que otra cosilla.

Y qué mejor manera de empezar que con... ¡¡Isla!!

Su artículo anciano de hoy: "Isla rompe madres". Publicado el 20 de diciembre de 2008.

Y sobre todo: vean Isla.



December 20
Isla rompe madres.

Pues nunca tuve planeado que "Isla" visitara mi blog, pero como ya es la tercera vez que veo el cortometraje en Youtube y me sigue poniendo la piel chinita, no puedo aguantarme más las ganas.

Isla me rompe la madre. Y también se la rompió a los jueces y organizadores de muchos festivales de cortometraje, en México y otros países.

Éste corto lo produjo mi entrañabilísimo amigo Omar Flores con una cámara de video casera, un presupuesto moderado, dos críos que le prestó el colegio Terranova, su enorme talento y su infumable paciencia de obrero vietnamita que sólo él tiene; porque créanme que yo, de tener que mover todos esos dibujitos una y otra vez para construir una cosa que se asemeje a una secuencia animada, al tercer frame ya mandaba todo al diablo y me metía en un agujero hondo a golpearme la cabeza.

Isla estuvo en ocho festivales de cortometraje; en varias ciudades de México, y en Argentina. De los ocho, ganó siete.

Y como yo soy una ególatra de porquería, también es mi obligación decir que yo le ayudé un poquito. A reconstruir una historia a partir de la memoria de su servidora, que no falla para esas cosas, y también un poco a apoyar en la realización del guión. Y mi nombre sale en los créditos. Y algún día esto estará en Cannes, así que mi nombre irá a Cannes, ¡¡ÓSOM!!

Gracias, Omar. Mis dos segundos de fama me han hecho muy feliz. Eres grande. Muy muy grande. Isla me ownea una y otra vez.


Isla Parte 1:





Isla Parte 2:


Sunday, March 1, 2009

Ginebra está llena de ironías.

Caminando el otro día por las callecitas de ésta ciudad que transpira Organizaciones Mundiales, activismo y Derechos Humanos, una amiga y yo notamos que cerca del edificio de la UNICEF existe una especie de bromita velada, presumiblemente dirigida a los niños víctimas de minas antipersonales.

Por un lado, en la parada de autobús de Naciones, donde comienza la calle de Ferney y justo enfrente del edificio central de las Naciones Unidas (madre mía, las Naciones Unidas de verdad... ¡¡esto yo todavía no me lo creo!!), está plantado el significativo monumento de La Silla:




El cual, como ya he explicado antes en varios tours amistosos y en un video de Facebook que a todo mundo hizo zurrar de risa, es un monumento representativo de las protestas contra las minas antipersonales. Por eso a la Silla le falta una pata, ven, porque es como los niños que caminan accidentalmente sobre una mina antipersonal mientras juegan en el desierto y pierden una pata. Fea, fea cosa. Entonces, pues la Silla está por eso, ven, porque representa cómo todas las naciones han sido exhortadas a terminar para siempre con las minas antipersonales.

Lo malo es que cuando uno toma la callecita a mano derecha y camina hacia la sede de la UNICEF, se encuentra ahora con ésto:



A algún sádico humorista le pareció gracioso nombrar "Camino de las Minas" a una calle a dos minutos de la UNICEF, la ONU y el pedazo de silla. ¡Que la gente hoy en día ya no tiene ningún respeto por las patas y brazos perdidos con las dichosas antipersonales!...
Querido ginebrino chistosón: a ver si tantos webos, de una vez le hubieras puesto al letrero: "Camino de las minas antipersonales que te van a tronar en la cara, pequeño niño afgano".
Mucho activismo y derechos humanos, y van por ahí nombrando con nombres de armas a las calles de junto a los organismos que las combaten. Jajajaja, chapeau. La Caudilla tiene algunas otras sugerencias para nombrar la calle que dé a cada uno de los siguientes organismos:
OMS: Boulevard de la Inmunodeficiencia Adquirida
ONU: Calzada de la Limpieza Étnica
Cruz Roja Internacional: Villa Desastre Humanitario
Médicos sin Fronteras: Distribuidor de la Frontera
Misión de México: Vamos, México